CEFALEA EN NIÑOS


mayo 15, 2019

A los 15 años se estima que el 75 % de los niños ya han acudido al médico por un dolor de cabeza.

Se estima que el 0.9% de las consultas en un departamento de urgencias pediátricas son debidas a Cefalea que requieren internamiento para su manejo.

Tomando en cuenta solo a la migraña, en la etapa preescolar predomina en el genero masculino, en la edad escolar sin predominio y después de la pubertad predomina en las mujeres hasta 3 a 1 en relación con el género masculino. Los tipos de cefaleas específicos más frecuentes en pediatría son las migrañas y la cefalea tipo tensional. 

La forma en que los niños manifiestan el dolor varía con la edad: antes de los 3 meses no hay comprensión aparente y responden al dolor de manera refleja, entre los 3 y 6 meses se manifiesta como enojo, a los 18 meses se desarrolla la capacidad de localizar el sitio que les duele, después de los 24 meses describen el dolor y pueden atribuirlo a una causa externa, a partir de los 5 años pueden identificar la intensidad del dolor y a partir de los 7 años pueden explicar por qué les duele y con qué factores se modifica.

Son múltiples las causas de cefalea en niños, siendo más frecuente los procesos inflamatorios infecciosos como enfermedades exantemáticas, infecciones de vías aéreas superiores, o bien ser parte de un proceso sistémico como una enfermedad reumática y en raras ocasiones, ser la manifestación de una enfermedad intracraneal como tumor, absceso, meningitis, etc.

El substrato anatómico del dolor de cabeza incluye receptores del dolor en piel cabelluda, vasos sanguíneos extracraneales, músculos de cabeza y cuello, senos venosos, duramadre de la base del cerebro, arterias durales. Las vías de transmisión del dolor son a través del nervio trigémino y se manifiesta por dolor localizado en las regiones frontal, parietal y temporal del cráneo.

Existen algunas diferencias en los criterios diagnósticos desde el punto de vista pediátrico en diferentes tipos de cefalea particularmente en el diagnóstico de Migraña.

El tipo de dolor en la migraña en el niño puede ser opresivo aparte de pulsátil, su duración se acepta que puede ser de una hora y la localización puede ser bilateral, los demás criterios son los mismos que en los adultos.

Existen diferentes tipos de cefaleas particularmente en la edad pediátrica como son los precursores de la migraña : síndromes episódicos que pueden asociarse a migraña como el vómito cíclico, migraña abdominal, el vértigo paroxístico benigno y la torticolis paroxística benigna, que habrá que tomar en cuenta en los diagnósticos diferenciales, como son padecimientos de tipo gastrointestinal y en el área otorrinolaringología.

Dentro del estudio del dolor de cabeza es importante tener en cuenta la edad del paciente, debido a que su manifestación y exploración puede ser diferente, por lo que el interrogatorio, exploración física pediátrica y neurológica son fundamentales.

En pediatría es importante investigar procesos infecciosos previos, accidentes, datos de maltrato, exposición a tóxicos. Específicamente en la parte de intensidad de la cefalea se puede tomar las diferentes escalas análogo-visuales; en las edades preescolar y primeros años de la etapa escolar, debido a la dificultad de comunicación de los niños.

Una exploración Física es fundamental y desde el punto de vista pediátrico la somatometría y particularmente el perímetro cefálico y las características de las suturas craneales en las edades preescolares, así como datos de rigidez de nuca, los cuales pueden dar datos importantes en descartar una lesión Intracraneal.

Los estudios para realizar dependerán de la sospecha diagnóstica, sin embargo, un estudio de neuroimagen puede ser necesaria para descartar procesos intracraneales.

Estudios como electroencefalograma no están indicados en el estudio de cefalea de manera rutinaria.

En relación con el tratamiento en pediatría, se tendrá que tomar en cuenta que se dosifica de acuerdo con peso y tener en cuenta los efectos secundarios. Con relación con la migraña en niños lo principal es identificar y evitar los factores desencadenantes. Se utilizan como primera instancia analgésicos no esteroideos como: Paracetamol, Ibuprofeno, ácido acetilsalicílico y naproxeno, pudiendo escalar dependiendo de la intensidad y control de los síntomas.

Los antimigrañosos específicos como los triptanos se pueden utilizar a partir de la adolescencia.

En relación con la profilaxis se puede utilizar topiramato y valproato de magnesio o bien si tiene un componente tensional antidepresivos.

La decisión final del tratamiento dependerá de una buena historia clínica, valoración clínica por parte del médico y en conjunto con el paciente tomar la mejor decisión.

Dr. Juan Hernández Aguilar
Neurólogo pediatra